Ensayo clínico

¿Sobrevivir es una traición? Para Marcos, la voz que narra este Ensayo clínico,  sobrevivir a ciertas inclemencias del siglo XX ha sido un acto heroico, sobrevivir a otras, un estigma. 

Ensayo clínico

De Gustavo Kusminsky

Ediciones Simurg

2013

¿Sobrevivir es una traición? Para Marcos, la voz que narra este Ensayo clínico,  sobrevivir a ciertas inclemencias del siglo XX ha sido un acto heroico, sobrevivir a otras, un estigma. En esta narración, la supervivencia es una doble traición: una traición política y una traición familiar. Sin embargo, ninguna de las traiciones de esta vida, que la voz que narra recuerda en una letanía continua e imparable, es presentadas como pecado, sino como una consecuencia ineludible de la vida del hombre. Ineludible como la enfermedad, la muerte y la supervivencia. Como si un hombre que recordase lo hechos de su vida no pudiese juzgarlos, sino simplemente nombrarlos, en su cruda realidad, uno a uno, como se fueron dando. Y Marcos intenta, ensaya, una expiación continua del pasado.

“Insistían en que el pecado, entendido como tal es un concepto cristiano y que nosotros, en rigor de verdad debíamos pensar en transgresión” recuerda Marcos su aprendizaje de la Talmud en donde esa transgresión grave es la falta de exactitud en la cita. Justamente, es traicionar la cita lo único que le queda a Marcos, que en la bruma de cigarrillo del café San Bernardo recuerda citando mal. Si los verdaderos testigos son lo que no sobrevivieron, sobrevivir implica recordar mal. Sobrevivir a un hijo, es una traición. Sobrevivir a los centros de detención militar supone por todos una traición. Y al fin y al cabo, toda ficción es, de algún modo, una falta a la cita, una traición más que un invento.

De esta cita errónea que es la ficción nace una novela que-podría-haber-sido, con personajes fácilmente reconocibles, con los que uno se identifica inmediatamente. La novela construye una verosimilitud que enferma, que angustia, en la forma segmentada y fluida que pueden hilvanar la cavilación de una persona sentada en un bar de atmósfera irreal. No llega a tener la forma ordenada de una autobiografía, más bien de una revelación interrumpida a momentos por los cambios de temática que el pensamiento dicta a la mente distraída. La voz que narra no se preocupa por el orden de la historia, sino que despliega el recuerdo en su deriva, sus repeticiones y sus asociaciones absurdas. A lo largo de la novela, la narración explora una serie de intrincaciones que relacionan la voz, la música y el canto de las sirenas, con el equívoco, la mentira y la necesidad de expiar, más allá de toda pérdida, esa doble traición.

Gustavo Kusminsky nació en 1959, recibió distinciones en premios literarios en la década del ’90 y en 2003 publicó la novela Voz de mujer italiana. Además de escritor es médico, o visceversa, y ésta no es su primera novela protagonizada por un Marcos, ya aparecían dos Marcos distintos en Médanos/Premio de Narrativa Hispanoamericana (Mansalva, 2011) novela que desde el título juega con esa fina línea entre verdad e invención.

 

Julia Milanese

    Nació en Adrogué, en la zona sur del conurbano bonaerense, en 1984 y fue donde escribió por primera vez en una revista, el pasquín literario Mitin, de producción independiente. Más adelante empezó a publicar algunos textos en su blog, http://fragmentosdecosasincompletasdehecho.blogspot.com.ar/, y luego también en http://juliamilanese.wordpress.com/ donde actualmente sube sus artículos. Está terminando la carrera de Letras en la UBA y es colaboradora en la revista de viajes, Roomin.

DESTACADOS

¿Puede una IA escribir con la profundidad de un ser humano o hacer literatura?

Llevo días escuchando dos palabras como si fueran un mantra que define a la IA, conceptualmente distorsionados y desemboca en conclusiones equívocas.

Las palabras: algoritmo y probabilidad.

Algunos datos técnicos no vienen mal para acercar la comprensión sobre qué es la IA.

Imaginen tener una agenda, que tiene solapas con el alfabeto (se ven en librerías de papel), hay una búsqueda con ese criterio alfabético. Ahora, dentro de cada letra, otra agenda, de nuevo con la organización alfabética, y dentro de esta otra, y así. Para una búsqueda dentro de esta organización,  igualmente con el criterio de orden alfabético (espero estén advirtiendo la dificultad de recorridos), siempre empezando desde la A y abriéndose camino en las diferentes agendas, unas dentro de otras; un árbol de datos. Esto es un algoritmo que con la velocidad actual de los chips no parece complicado. Sumemos la predicción: la probabilidad que habiendo entrado con una letra, la próxima sea alguna determinada. Por ejemplo, entro con una consonante, hay más probabilidad que la próxima sea una vocal. Con ello empiezo una búsqueda ahorrando entrar por consonantes y con eso reduje el “camino” a 5 vocales. Es un ejemplo algo burdo, pero ilustra las dos palabras: algoritmo y probabilidad. Los algoritmos de búsqueda están muy afinados a raíz de la tecnología blockchain de las Criptos.

PERSONAJES

Los ritos ardientes de Julio Barco por Nicolás López Pérez

En esta presentación, además del material del poeta Julio Barco, convocante, provocativa, inspiradora, destaco el trabajo del escritor, crítico, abogado Nicolás López Pérez, su generocidad lo antecede. Ya tenemos en nuestra revista exhaustivos comentarios sobre la obra de ambos, además de colaboradores desde otros países.

La obra de Julio Barco nunca se despide de la vieja Lima, instaura una actitud permanente de traza del nuevo siglo y el antiguo, con una poética de rememoraciones, melancolía, causas, amores, lugares, una danza procaz apasionada y en estado permanente de exhorbitancia poética con una estrategia de seducción de voz y cuerpo, conseciones al discurso y estética del nuevo y viejo esquema de tributo a su época la Internet.

Leemos a Nicolás Lóepez Pérez, en este trabajo crítico sobre su obra.

 

DRAMATURGIA

Bajo un manto de estrellas de Manuel Puig por Ana Abregú

“Una especie de solidaridad tácita une a los extraviados y a los solitarios”

“Una revolución en las costumbres” en Bye-Bye, Babilonia, crónicas de Nueva York, Londres y París.

 

 

En esta obra se siente “una especie de solidaridad entre extraviados”, “es exactamente como lo imaginé”, se dirá recursivamente en la obra. La frase describe el sino de la época: la educación sentimental  provenía de escuchar la novela radial; el relato se reconfiguraba en el oyente, punto en común entre las clases: la pareja mayor, dueños de estancia; la pareja de misteriosos visitantes, adultos; y la niña de la casa, adoptada; revelan los sueños que nacieron en la era de las telenovelas y su influencia como parte de la penetración cultural que accionan el hecho constructivo del imaginario y los desvíos que propone el foco en la ilusión, en un ambiente endogámico que detona con diversas resonancias. El relato oído alimenta un romanticismo en el que cada personaje fantasea e imagina el objeto del deseo.

 

Las Bingueras de Eurípides de Ana López Segovia por Ana Abregú

Suerte, risas y mucho bingo. ¡Prepárense para gritar '¡Bingo!'! La emoción del dabber.

[Lema popular]

 

Divertida propuesta que remite a diversos estilos teatrales, así como referentes eclécticos.

Dionisia –Mar Bell Vazquez–, mito griego, baja a la tierra; y como el primigenio, se aboca a remover la estructura social conmoviendo la forma tradicional de subyugación de mujeres. Dionisio toma cuerpo de mujer para acompañar el proceso de empoderamiento. Eco entre formatos que se extienden entre géneros de humor basado en la expresividad corporal y diálogo punzante.

(Foto tomada de Internet)

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