Sobre la desilusión

Feria del Libro 2019 – 45ª. Edición.

Viernes 26 de abril – Sala Alfonsina Storni

“Poesía y Vida”. Lectura de Poemas.

Diálogo entre Ivone Bordelois y Antonio Requeni -Organizado por la SADE (Sociedad Argentina de Escritores).

 

 

Con ilusión me acerqué a la Sala Alfonsina Storni para participar, como oyente y poeta, del diálogo propuesto, “Poesía y Vida”, entre Ivonne Bordelois y Antonio Requeni. En especial, confieso, quería escuchar a la autora de La palabra amenazada («Si es verdad que la pulsión de vida, el Eros, es la que vincula al deseo y su objeto, y el placer es la señal certera de su realización, el lenguaje es una de las manifestaciones más evidentes y universales del principio del placer»).
Con palabras precisas y atinadas Alejandro Vaccaro, presidente de la SADE, agradeció el encuentro, señalando la gran convocatoria que siguen produciendo los libros, incluso y a pesar del momento actual del país, destacando la gravitación y la importancia cultural de esta Feria.
Sin embargo, la desilusión comenzó cuando, contrario a lo que proponía la invitación, se dio inicio a una suerte de homenaje a Alejandro Guillermo Roemmers –quien esa misma tarde había inaugurado en la SADE una sala, donada por él y que llevará su nombre–, por su presentación de su último libro en París, Francia; y la próxima aparición de un libro de Sonetos de amor en Madrid, España. Para hablar del primero, se pasó un video del evento (al que asistieron conocidas figuras del ámbito cultural internacional, cine, tv., etc.) y para el segundo, previa a una “aduladora” entrevista de Nuri Escorza, se lo invitó a leer tres sonetos (incluidos en el libro a presentar). 
Luego, a excepción de dos lecturas en las que me detendré, mi desilusión solo fue en aumento. 
Escribirlo hoy es también recordar el gesto que hice esa noche al irme, cuando instintivamente sacudí el cuerpo para echar fuera los malos pensamientos, así como hacen los perros al salir del agua, intentando no salpicar a nadie con mi estremecimiento.
Las excepciones entonces, para no olvidarlas y para destacarlas fueron la lectura de un bellísimo poema de Ester de Izaguirre –nacida en Asunción, en 1923; muere en Buenos Aires, en 2016– “Judas”, incluido en su libro Judas y los demás (1981). Teresa Palazzo nos brindó una muy preparada y emotiva lectura de este poema del cual transcribo aquí sólo unos versos: 
 
Ojalá me hubieras dicho: « te comprendo,
lo estás haciendo bien. Ánimo Judas».
Ellos navegaban en barcas
Que el prodigio salvaba de mares tenaces,
Yo me hundí hasta tocar fondo en los abismos
De ese mar de ser hombre y acordarse.
 
 
y luego Nélida Pessagno, que le puso la voz un gran poema de su autoría: “No soy nadie”.
Al finalizar las lecturas (con sus más y sus menos), imaginando que afuera seguía lloviendo, y que ya estaba ahí, aposté al diálogo programado, extrañada de no verla a Bordelois por ningún lado. Requeni sí se encontraba, desde temprano.
Frente a la comunicación, que se hizo en ese momento, de que Ivonne Bordelois no iba a poder estar (se rompió la cadera, pobre), mi desilusión viró entonces de la decepción a la tristeza. 
En su reemplazo estuvo Beatriz Peña Schaefer, quien, imagino, fue reemplazo de último momento y no pudo preparar mucho. Requeni no aportó demasiado, más que algunas frases como que “poesía y vida son sinónimos” o que “la poesía no puede explicarse, se experimenta”, y algunas menciones a Jorge Calvetti.
En fin, este texto seguramente me va a valer la excomunión del círculo de poetas, pero antes de que finalizara el encuentro, debo confesar que me fui.
Desilusionada, decepcionada, triste.
No comprendo la ausencia de voces nuevas, jóvenes.
No comprendo la necesidad de usar estos encuentros para promociones personales. (Y lejos este comentario de ser una crítica a la obra de Roemmers).
No comprendo cómo se desperdicia un espacio y un tiempo.
No comprendo cómo no se dan cuenta.
 
María Claudia Otsubo – Para metaliteratura.com.ar
Buenos Aires, 28 de abril de 2019
 

 

 





 

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Literatura latinoamericana

DESTACADOS

¿Puede una IA escribir con la profundidad de un ser humano o hacer literatura?

Llevo días escuchando dos palabras como si fueran un mantra que define a la IA, conceptualmente distorsionados y desemboca en conclusiones equívocas.

Las palabras: algoritmo y probabilidad.

Algunos datos técnicos no vienen mal para acercar la comprensión sobre qué es la IA.

Imaginen tener una agenda, que tiene solapas con el alfabeto (se ven en librerías de papel), hay una búsqueda con ese criterio alfabético. Ahora, dentro de cada letra, otra agenda, de nuevo con la organización alfabética, y dentro de esta otra, y así. Para una búsqueda dentro de esta organización,  igualmente con el criterio de orden alfabético (espero estén advirtiendo la dificultad de recorridos), siempre empezando desde la A y abriéndose camino en las diferentes agendas, unas dentro de otras; un árbol de datos. Esto es un algoritmo que con la velocidad actual de los chips no parece complicado. Sumemos la predicción: la probabilidad que habiendo entrado con una letra, la próxima sea alguna determinada. Por ejemplo, entro con una consonante, hay más probabilidad que la próxima sea una vocal. Con ello empiezo una búsqueda ahorrando entrar por consonantes y con eso reduje el “camino” a 5 vocales. Es un ejemplo algo burdo, pero ilustra las dos palabras: algoritmo y probabilidad. Los algoritmos de búsqueda están muy afinados a raíz de la tecnología blockchain de las Criptos.

PERSONAJES

Florecidos miles de estallidos

Sergio Ojeda Barías, Berlín. Santiago de Chile: Mago Editores, 2024.

[Un libro de Sergio Ojeda Barías (Puerto Natales, 1965) es un acontecimiento en este siglo. De Pedazo de mundo (2000) a Tardanza del fuego (2007), Berlin es un libro introspectivo, para celebrar, para transitar entre los poemarios escritos reescribiéndolos. Este poeta chileno crea campos magnéticos en que las palabras vibran y los cuerpos también. Berlin es un libro de la esperanza, de una vida por delante, de una obra como horizonte].

La primera vez que tuve noticias de Sergio Ojeda Barías fue en 2016. Eran mis años de la avidez literaria, tenía varios cuadernos de proyectos de poemas, no conocía a nadie que publicara ni que enloqueciera con la literatura. MAGO Editores publicitaba unos talleres de poesía semanales impartidos por el referido. No recuerdo exactamente el día, pero después de la oficina, tenía esa reunión de poesía, un ese espacio vista Pio Nono (la vereda desde la que estuve mirando por más de un lustro), Piso Diez, como la altura en la que se desarrollaba, fue el nombre que Max González le dio al taller. Recuerdo a otros talleristas, Cristian y Francisco. Nunca más los volví a ver: uno parecía un buen lector de poesía y literatura chilena y el otro trabajaba como captador de clientes en una ISAPRE. Yo había tenido la experiencia de talleres en la SECH (Sociedad de Escritores de Chile), pero estaba lejos de una voz poética (¿lo sigo estando?).

 

 

DRAMATURGIA

Bajo un manto de estrellas de Manuel Puig por Ana Abregú

“Una especie de solidaridad tácita une a los extraviados y a los solitarios”

“Una revolución en las costumbres” en Bye-Bye, Babilonia, crónicas de Nueva York, Londres y París.

 

 

En esta obra se siente “una especie de solidaridad entre extraviados”, “es exactamente como lo imaginé”, se dirá recursivamente en la obra. La frase describe el sino de la época: la educación sentimental  provenía de escuchar la novela radial; el relato se reconfiguraba en el oyente, punto en común entre las clases: la pareja mayor, dueños de estancia; la pareja de misteriosos visitantes, adultos; y la niña de la casa, adoptada; revelan los sueños que nacieron en la era de las telenovelas y su influencia como parte de la penetración cultural que accionan el hecho constructivo del imaginario y los desvíos que propone el foco en la ilusión, en un ambiente endogámico que detona con diversas resonancias. El relato oído alimenta un romanticismo en el que cada personaje fantasea e imagina el objeto del deseo.

 

Las Bingueras de Eurípides de Ana López Segovia por Ana Abregú

Suerte, risas y mucho bingo. ¡Prepárense para gritar '¡Bingo!'! La emoción del dabber.

[Lema popular]

 

Divertida propuesta que remite a diversos estilos teatrales, así como referentes eclécticos.

Dionisia –Mar Bell Vazquez–, mito griego, baja a la tierra; y como el primigenio, se aboca a remover la estructura social conmoviendo la forma tradicional de subyugación de mujeres. Dionisio toma cuerpo de mujer para acompañar el proceso de empoderamiento. Eco entre formatos que se extienden entre géneros de humor basado en la expresividad corporal y diálogo punzante.

(Foto tomada de Internet)

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