Las razones de la sal por María Claudia Otsubo

Al azar andamos por los libros como flâneur

 

 

Salgo del mar y con la piel todavía impregnada de salitre me dispongo a finalizar Las razones de la sal, que bien podría haberse escrito aquí, en Imbassaí, la narradora tendida sobre la arena “cargada de sodio y otros minerales de una tierra llamada escritura”. Me reencuentro con su escritura atravesada por otras escrituras, en el universo particular y único de la lectura que me propone –con incertidumbres en el inicio, con plena confianza, luego– Ana Abregú.

 

Me detuve primero, y me detengo también ahora, en el hermoso (intento pensar otra, pero no surge ninguna palabra diferente) texto de López-Pérez, para reparar luego en las dedicatorias (sobre todo en una), y en los epígrafes.

La cita de Oitos Rossi me trae reminiscencias de La condesa sangrienta, y como ya me ha ocurrido con otros libros de Abregú, invita a sopesar la fuerza del título.

En el tiempo de la lectura, en alguna de sus noches, veo la película inglesa recientemente estrenada. Saltburn. La sal. Otra vez la sal, pienso, tan vinculada al fuego, a la herida, a las pasiones en la historia que propone la pantalla.

Y después regreso a la novela, ando y desando las páginas, me demoro en las asociaciones, me deleito en los intertextos. Regreso una y otra vez a la novela de Abregú, sutil e inteligente. que no puedo leer sin dejar marcas sumando mi huella a las que va ofreciendo la misma narradora, que en este texto no deja de develar las propias, las que responden al registro de sus lecturas.

Acompaño los ojos de la rubia que se posan tanto en el libro por leer, el Ulises de Joyce, como en el cuerpo del bello, Grau, quien tanto deambula por su biblioteca como por el cuerpo de la rubia.

Un ir y venir de las lecturas y los cuerpos que se abrazan, que se alejan y se acercan.

Un ir y venir donde prevalece sobre todo el deseo; entrar y salir de la lectura que no llega nunca a realizarse por completo. Merodeos, acercamientos, especulaciones del inicio de una lectura que remite a otras y así sucesivamente.

Acompaño los ojos de la rubia que se aproximan y rozan, que miran “la luz natural que entra por la ventana desamparada; es el tiempo que está hecho de abandonos…”.

La novela de Abregú es una “historia de las inconclusiones…” el Ulises y la distancia le ganará la carrera a Grau que termina desvaneciéndose en un otro incierto. ¿Un nuevo sueño de la rubia para reemplazar al dibujado en aquel otro cuerpo?

Lectura – Escritura – Eros; Vallejo, Storni, Elizondo… Joyce.

Y entre los pensamientos de la rubia, las tentativas de Helena y las otras de Álvaro; mientras los inesperados aciertos del bello Grau iluminan de luna la mesa de noche... y yo lectora que me dejo conducir (como me tiene acostumbrada Abregú) por la deriva de su narrativa, ya lo dije y lo repito, sutil e inteligente.

 

Imbassaí, finales de febrero 2024, la piel impregnada de sal.

 

DESTACADOS

Cuando la máquina crea: la edición de libros en la era de la IA

13:00 a 14:00 – Conferencia: Cuando la máquina crea: la edición de libros en la era de la IA (o cómo seguir siendo indispensables) Organiza: Proyecto451 A cargo de: Daniel Benchimol Sala Victoria Ocampo, Pabellón Blanco, 1º piso

¿Somos descartables?

Desafíos que la IA nos impone. Imagina dónde estaremos en un año y qué estaremos haciendo.

Mira este video imperdible que te muestra el estado de la realidad actual de la IA, lo que puede hacer y qué papel juegan los humanos en esta nueva realidad.

La IA vino para quedarse, qué vamos a poder hacer nosotros, los humanos, con este nuevo paradigma que se nos presenta.

Qué vamos a hacer los escritores, los informáticos, ¿terminaremos de diferenciar la generación de contenidos de los contenidos de calidad? Qué los diferencia: ¿el origen de la información?, ¿la capacidad de fidelidad a la información?, ¿la captación de la atención del público?

PERSONAJES

El corazón es habitar la experiencia y el ritmo

Pasquale Mesolella, I giorni della pandemia. Prato: Pentalinea, 2024.

 

[Este es tal vez uno de los libros más emocionantes en la obra de Pasquale Mesolella (Teano, 1949). Va dedicado a “tutte le persone, note e ignote, conosciute e sconosciute, vittime inermi ed innocenti del covid o della guerra ucraina”. A simple vista, puedo decir que se ve a un poeta desprovisto de artilugios del lenguaje y que consagra la escritura como si su mano fuese un sello de lacre. Un poeta que se ha convertido en un reportero de un tiempo álgido que no está tan lejos y que continúa a hacernos eco. Los primeros textos de esta colección corresponden a enero de 2019 y los últimos, como el prólogo, se remontan a septiembre de 2023]

 

DRAMATURGIA

Bajo un manto de estrellas de Manuel Puig por Ana Abregú

“Una especie de solidaridad tácita une a los extraviados y a los solitarios”

“Una revolución en las costumbres” en Bye-Bye, Babilonia, crónicas de Nueva York, Londres y París.

 

 

En esta obra se siente “una especie de solidaridad entre extraviados”, “es exactamente como lo imaginé”, se dirá recursivamente en la obra. La frase describe el sino de la época: la educación sentimental  provenía de escuchar la novela radial; el relato se reconfiguraba en el oyente, punto en común entre las clases: la pareja mayor, dueños de estancia; la pareja de misteriosos visitantes, adultos; y la niña de la casa, adoptada; revelan los sueños que nacieron en la era de las telenovelas y su influencia como parte de la penetración cultural que accionan el hecho constructivo del imaginario y los desvíos que propone el foco en la ilusión, en un ambiente endogámico que detona con diversas resonancias. El relato oído alimenta un romanticismo en el que cada personaje fantasea e imagina el objeto del deseo.

 

Las Bingueras de Eurípides de Ana López Segovia por Ana Abregú

Suerte, risas y mucho bingo. ¡Prepárense para gritar '¡Bingo!'! La emoción del dabber.

[Lema popular]

 

Divertida propuesta que remite a diversos estilos teatrales, así como referentes eclécticos.

Dionisia –Mar Bell Vazquez–, mito griego, baja a la tierra; y como el primigenio, se aboca a remover la estructura social conmoviendo la forma tradicional de subyugación de mujeres. Dionisio toma cuerpo de mujer para acompañar el proceso de empoderamiento. Eco entre formatos que se extienden entre géneros de humor basado en la expresividad corporal y diálogo punzante.

(Foto tomada de Internet)

Mi novia del futuro de Anto Van Ysseldyk por Ana Abregú

«¡Como si se pudiera matar el tiempo sin herir a la eternidad!».

(Henry David Thoreau)

 

El viaje en el tiempo es un tópico complejo, sobre todo durante una obra teatral, donde la comparación entre temporalidad se debe resolver en un espacio reducido. Esta situación se metaforiza en un escenario con elementos de luz y desplazamientos en espiral, haciendo y deshaciendo el tiempo en el espacio, tal como se define el tiempo mismo, una tela, una autopista peraltada.

 

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